Usualmente negrillas y subrayados son nuestros.

martes, 22 de enero de 2008

Modelo, Sistema Económico y Esquipulas II

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Este artículo tiene para nosotros la importancia siguiente:

1. Intenta vincular teóricamente la importancia de los problemas económicos en los problemas políticos y militares en el caso centroamericano de la década del 80 del siglo XX.

2. Es un esfuerzo por establecer la diferencia conceptual entre modelo y sistema económico.

3. Se dirige a precisar el contenido teórico al Acuerdo de Esquipulas II, de agosto de 1987 para propiciar un cambio del modelo económico.

4. Tiene la perspectiva de establecer la diferencia estratégica e histórica sobre lo que significa cambiar el modelo económico pero no el sistema económico conforme a una determinada correlación de fuerzas políticas.

Fué publicado en: Documento de Trabajo, Coordinación Universitaria de Investigación Científica, CUIC, Universidad de El Salvador, Año 3, Nos. 13-14, Noviembre 1988 - Enero 1989.


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Vigencia de un antecedente: Esquipulas II

El Acuerdo de Esquipulas II, firmado por los cinco Presidentes Centraomericanos en agosto de 1987, tiene trascendencia en varios niveles.

El texto del Acuerdo estudiado pro diversos analistas sin duda merecerá atención en el futuro al incrementarse la importancia política del mismo.

Y es que Esquipulas II condensa en sus planteamientos una peculiar coyuntura con su respectivo “nudo” de contradicciones: es una expresión de una particular correlación de fuerzas políticas y militares en la región; de intereses económicos que tienen crisis con “profundas divisiones sociales”; están implícitas en al Acuerdo las corrientes latinoamericanistas que a fuerza de los hechos van produciendo la necesidad de incorporar elementos de autodeterminación en el destino de la región partiendo de Contadora, siguiendo con Caraballeda y el Grupo de los 8; el contexto mundial está también presente en el sentido de que tanto el Este como el Oeste y el Norte y el Sur están en etapas críticas de su desarrollo y se produce por esta misma dinámica posibilidades de autodeterminación y/o de jugar un mayor papel protagónico a las fuerzas actuantes al interior de las sociedades centroamericanas.

Si se pudiera realizar una apreciación un tanto simple, pero que quizás retrata el balance de fuerzas, podrías decirse que en Esquipulas II estuvo presente el reconocimiento de que nadie puede hacer lo que quiere en este momento de la historia pero que todos deben hacer lo que pueden para conseguir un clima de estabilidad que sea un valladar a un conflicto de proporciones regionales, latinoamericanas o continentales y peor, mundiales.

Continuará...
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lunes, 21 de enero de 2008

Credibilidad y publicidad política

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Reproducimos este trabajo porque:

1. Tiene actualidad para en el contexto de una campaña electoral.

2. Puntualiza el papel de los medios de comunicación y nos parece da bases para deducir de que con relativamente poco dinero se puede hacer mucha labor de persuación debibo a la revolución tecnológica de los medios de comunicación.

3. Enfatiza que la línea de comunicación en una campaña electoral no la da el experto en medios de comunicación sino el estratega político.

4. Pone de relieve el papel de la estrategia política, en la que nos parece, la caracterización del enemigo económico y político a vencer es central.

5. Advierte sobre la mercantilización de la política, en la que la capacidad de persuación es central. Y da un listado de formas de venta del candidato que hay que tomar en cuenta, no para imitarlas sino para procesarlas y combatirlas.

6. Para nosotros la capacidad de persuación se centra en la firmeza en los principios del trabajo y la capacidad para propagandizarlos, publicitarlos, agitar, organizar como base para la construcción del socialismo, y no en el abanico de formas de presentación del producto a vender que es el candidato.

7. Aunque se refiere a un caso mexicano del pasado electoral tiene sugerencias de actualidad. Los subrayados son nuestros.

Tomado de:


Tomado de:


http://www.monografias.com/trabajos12/credpol/credpol.shtml


 Credibilidad Política y Marketing Mix.


Introducción
¿Qué ha cambiado ahora?
El marketing y el cuartel de guerra
El estratega y la estrategia
Reflexiones finales



Introducción


Tres factores han sido los que se conjugaron para dar pauta a las campañas políticas modernas: la conquista del territorio de la mente, el uso continuo de los medios de comunicación y la sociedad de mercado que abrió también la política a la oferta y demanda del mercado.


En el mismo siglo XX hubo dos formas de conquistar territorios: por la fuerza y por la mente.


A casi 50 años de la Segunda Guerra Mundial, al final del siglo pudimos apreciar cómo pasaban las guerras de las armas, la fuerza física y la violencia a las arenas del convencimiento, la persuasión.


De igual manera, la tecnología nos abrió las perspectivas a un mundo inimaginable de comunicaciones. Los medios de comunicación masiva nos dan el don de la ubicuidad, podemos llegar a cualquier público en cualquier rincón del planeta o del país. Los medios, asimismo, tienen un gran poder persuasivo y un atractivo característico que llega a toda la gente.


Las campañas modernas se van a caracterizar por la presencia significativa de los medios.


En tercer lugar, la sociedad de mercado con su economía abierta también abrió el mercado a la política, ahora hay una lucha política que ganará aquél que tenga la mayor capacidad para convencer y persuadir de que sus propuestas son las más viables y adecuadas para detentar el poder.


¿Qué ha cambiado ahora?


Hasta hace poco tiempo, los estadounidenses se preciaban de que a través de sus exit pools (encuestas de salida) se podía saber con 24 horas de anticipación quién sería el Presidente. En México, también hasta hace poco tiempo lo sabíamos, pero con un año de diferencia. Las reglas no escritas del poder eran múltiples, el código lo solía descifrar cada político. Sin embargo, aquella frase de Fidel Velázquez que decía: "quien se mueve no sale en la foto" ya no es cierta en las campañas modernas –si lo duda pregúntele a Vicente Fox–; de igual manera la frase: "En política nada está escrito" se derrumba ante la nueva situación. Ahora los estrategas políticos o los constructores de la ingeniería política se dedican a escribir lo que en política no estaba escrito.


El sistema político mexicano cambió las claves que le daban estabilidad, éstas se transformaron o se debilitaron y la entrada del neoliberalismo les dio un sentido distinto. Nuevos actores políticos como la Iglesia, la sociedad civil organizada, los medios de comunicación, los grupos económicos, la globalización, la regionalización afectaron de manera fundamental al propio sistema que entró en crisis desde 1994.


La llegada a la Presidencia del salinismo rompió las reglas implícitas del poder y ahora, cada quien con su juego, mantiene al sistema político en actividad permanente.
A su vez, viejos actores pasaron a primer plano como los partidos políticos, un fortalecimiento primero del PAN y después del PRD, una teología de la liberación involucrada con las luchas guerrilleras chiapanecas, resolución de rencillas políticas por medio del asesinato político, todo ello también alterando el funcionamiento que estaba bajo el control presidencialista antes del neoliberalismo.


El marketing y el cuartel de guerra


Ante todo, hay que aclarar que el marketing no es la panacea, es un instrumento que puede servirnos para organizar y ser más efectivos con la campaña política.


La publicidad política por sí misma no es capaz de llevar al triunfo a un candidato.


Se han multiplicado ejemplos locales, nacionales y extranjeros en los que las campañas publicitarias han sido exitosas pero el candidato ha perdido. La explicación, en mucho, se encuentra en la necesidad de manejar la campaña con sensibilidad política, de ahí que paradójicamente quien deba dar las líneas de comunicación de una campaña sea el estratega y no el comunicólogo. Este último lo que tendrá que hacer será reflejar esas líneas en la concreción de diferentes medios de comunicación que van desde el lema hasta los medios más complejos y caros como los mismos electrónicos, con la suficiente racionalización de recursos y de información que no sature pero que sí multiplique el efecto de los mensajes.


De ninguna manera, el marketing sustituye al ejercicio de la política o dicho en términos de los politólogos: un instrumento publicitario jamás podrá sustituir al enigmático arte de hacer política.


El marketing trabaja hacia afuera, es lo público y lo que se hace público, la ingeniería política en su mayor parte se construye en el cuartel de guerra y una porción de ella, sólo el grupo compacto de estrategas la manejan.


El estratega y la estrategia


La estrategia política es un arma poderosa que permite conocer al adversario, a los públicos, al contexto y, desde luego, nos puede proporcionar opciones sobre cómo conquistar la victoria. Es al estratega político a quien le toca posicionar a los candidatos y a los partidos dentro de una oferta política para que el público elija a sus gobernantes.


La estrategia es un proceso sistemático y controlado que permite diagnosticar, planear, elaborar y evaluar las diferentes etapas de una campaña.


Con el diagnóstico se puede detectar desde las demandas de la población, el perfil esperado del candidato, hasta el grado de conocimiento del candidato pasando por el conocimiento específico de cada región o área que permite detectar los grupos de presión, de interés y de influencia, así como la situación particular de las mismas.
Nuevas técnicas como el atlas político nos sirven para entender, planear y obtener el triunfo electoral.


Antes en política las campañas equivalían al disparo de un escopetazo con el que los perdigones caían indistintamente, con las campañas modernas el tiro debe ser exacto, milimétrico, dar en el blanco. Para ello, el estratega debe tener elementos y conocimientos cada vez más complejos, cada vez más certeros apoyados en talento e imaginación creativa para poder competir en el mercado electoral y "vender" adecuadamente a su candidato.


El trabajo no es fácil, ya que no se trata de vender productos estáticos que no se mueven de un anaquel, se trata de vender intangibles y tratar con situaciones tan delicadas como la identidad, los símbolos, los ritos, las percepciones, las creencias, la credibilidad, la verosimilitud, la legitimidad.


Una parte importante de venta del candidato es el trabajo de imagen que se ha popularizado tanto los últimos años. Sin embargo muchos piensan que cambiar la imagen es sólo el trabajo de cambiar la ropa o el look del cabello. El trabajo de la imagen va más allá. Hay mucho que trabajar por el lado del lenguaje corporal: los gestos, la postura, la figura cuando está sentado, las distancias, los muebles de la oficina, la cara comprendiendo cejas, ojos, barba, frente, boca, mentón, arrugas, patillas, bigote, fleco; lenguaje paravocal como tonos, ritmos.


Del lenguaje no verbal tiene que estudiarse el oral y el escrito todos a la luz de los discursos que se manejan y de las formas de comunicación que se tienen con los demás.


En este trabajo de marketing, interactúan múltiples disciplinas y actividades, no sólo la política, también la comunicación, la redacción, la oratoria, el teatro, la psicología, la cromoterapia y hasta el feng shu para la decoración de un lugar.


Reflexiones finales


Algún autor decía que la herramienta estaba aquí y que debíamos utilizarla, efectivamente, antes que satanizarla es necesario que aprendamos la utilidad que puede aportar a la política, los que están convencidos de ella comienzan a ascender, Fox ha logrado ser tan conocido como Luis Miguel según decía, pero no ha sido suficiente, por eso el planteamiento de una campaña en diversas etapas: la primera es sensibilizar y que la gente nos conozca, se acostumbre a nuestra presencia, luego informar sobre las cualidades, después motivar a la gente con algo que le conmueva que sea parte de sus objetivos, de su vida para llegar a la acción, esto es, al voto.


Alejandro Castro Velazquez
alejandrocast91@hotmail.com
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Estado: Mito y Realidad

Un panorámico y puntualizado recuento histórico de las principales ideas sobre el Estado se encuentra en:

http://www.monografias.com/trabajos14/mitoyestado/mitoyestado.shtml

Y en:

www.estado-mito.blogspot.com

La guerra como política por otros medios

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Breve y precisa nota biográfica de Clausewitz. Uno de sus grandes aportes fué concebir la guerra como continuidad de la política..."por otros medios"..."por medios violentos". El marxismo, con Lenin y Mao, retoma la concepción de Clausewitz. Lenin sostuvo la necesidad de la violencia armada para la toma del poder y Mao puntualizó sintetizó el planteamiento en su conocida frase: "el poder nace del fusil"...

Clausewitz es un estratega, contemporáneo de Hegel aunque se dice que nunca lo leyó. Si Hegel descubrió la dialéctica estudiando la filosofía de la historia, probablemente pueda decirse que Clausewitz descubrió la dialéctica estudiando la filosofía de la guerra. La diferencia es que Hegel enunción las leyes de la dialéctica en tanto que Clausewitz las aplicó empíricamente.

La nota biográfica de Clausewitz en:

http://www.biografiasyvidas.com/biografia/c/clausewitz.htm

"Karl Von Clausewitz

Militar prusiano (Burg, Magdeburgo, 1780 - Breslau, Silesia, 1831). Se formó durante las guerras contra la Francia de la Revolución y de Napoleón, durante las cuales combatió (desde 1793), fue hecho prisionero (1806), participó en la reorganización del ejército prusiano (1808) y sirvió al zar de Rusia para seguir luchando contra los franceses tras la derrota prusiana (1812).

Reintegrado al ejército prusiano una vez vencido Napoleón (1815), se convirtió en director de la Academia de Guerra (1818-30); poco después se le encomendó también la formación militar del príncipe heredero (el futuro Federico Guillermo IV).
Se le considera el fundador de la doctrina militar moderna por las teorías que acuñó durante aquel periodo docente, lo esencial de las cuales está recogido en su obra De la guerra.

Según su frío análisis «la guerra es la continuación de la política por otros medios», por lo que en periodo de guerra se obtiene la máxima eficacia unificando la dirección política y militar (como, efectivamente, se haría en Alemania durante las dos guerras mundiales).

Creó también el concepto de «guerra total», que compromete todos los recursos y energías del país y toma como objetivo de guerra el país enemigo en su integridad; dicho concepto se haría realidad en las guerras del siglo xx."
Karl Von Clausewitz es de lectura obligada para todo político porque como Sun Tzu, antes que militares son estrategas. Y la estrategia es el centro de la proyección y de la acción política. Una selección de partes importantes de la obra cumbre de Clausewitz, puede leerse en línea, en español en:

http://perso.wanadoo.es/ddragon/delaguerra.PDF

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sábado, 12 de enero de 2008

Polemología: estudio social del fenómeno guerra

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"Hace ya largo tiempo se ha instalado la tesis que el estudio de los conflictos requiere sobretodo una aproximación sociológica.
Esto tiene que ver, indudablemente, con el prestigio de una exégesis que manifiesta que los fenómenos sociales tienen regularidades y que de aquellas se pueden deducir leyes o estadios del comportamiento.
Por lo demás la base positivista de esta argumentación es la misma que dió origen al desarrollo moderno de las ciencias y especialmente del área científica.
En este sentido la sociología ha derivado en dos grandes líneas: una de tendencia francesa y continental, que argumenta mediante prototipos o modelos, cada uno con su casuística (2).
La otra, la anglosajona, que privilegia la base numérica como base de sus interpretaciones y que ofrece una visión pragmática como en Lewis Coser.

Modernamente el intento por constituir una “ciencia del conflicto”, una polemología, debido a la pluma de Gastón Bouthoul (1953), ha estado signado por la determinación de identificar modelos que puedan ser útiles al cientista político y al conductor con base científica.
Lo que importa es la frecuencia y las características de los conflictos.
Estos son tipificados y jerarquizados hasta alcanzarse ciertos grados de convicción respecto de su entidad.
Para Bouthoul la polemología es el estudio de “fenómeno-guerra” que tiene por rasgos el carácter colectivo, el elemento subjetivo, la intención, y el elemento político –la organización-.
El fenómeno sería la guerra, definida como “una lucha armada y sangrienta entre agrupaciones organizadas”.(3)

(2) Entre los más importantes: Raymond Aron, Gastón Bouthol, Julien Freund, Bertrand Lang. Ver por ejemplo de Julien Freund, Sociología del Conflicto, Artegraf S.A., Madrid, 1995.

(3) Gastón Bouthol, La guerra, Oikos-Tau Ediciones, Barcelona, 1971, p. 35. (La Guerre, Presses Universitaires de France, 1971)."

En:

http://www.acague.cl/publicaciones/CD22/his/a/1.pdf
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Sociología de la Guerra

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Desde Durkheim, la Sociología es omnipresente.

Todo lo humano es un hecho social, que puede ser examinado "como cosa" con las reglas que él nos legó y que otros científicos antes de Durkheim han contribuido a perfilar o afilar, como las precisas y punzantes teorías de Marx.

La misma naturaleza se convierte cada vez más en un hecho social debido a la transformación que el ser humano realiza en ella por medio del trabajo.

Este carácter omnipresente de la Sociología permite muchas aplicaciones que constituyen elementos básicos para la comprensión de los fenómenos. Una de estas es la Sociología de la Guerra, que puede verse como parte de otra aplicación, de la Sociología Militar. La guerra, entendida como una confrontación armada y sangrienta, es un momento de lo militar.

La Sociología de la Guerra tiene relación directa con la Sociología Política.

Recordemos que Engels señaló que la base material de vida, incluyendo la tecnológica, determina la organización de las sociedades y consecuentemente de los ejércitos y que la lucha armada es la expresión concentrada de intereses económicos de clases sociales.

Sin Francia, no hay Sociología. Sin Escocia e Inglaterra no hay Economía Política. Compte y Saint Simon, crearon la Sociología. Smith y Ricardo la Economía Política. Sin Alemania no hay crítica filosófica, económica y sociológica; no hay Hegel, Marx ni Engels.

Mantener un liderato creador no es fácil, sobre todo en la Ciencia.

Nos parece que los franceses no perdieron el liderato en la Sociología en el siglo XX. Y en este contexto Gaston Bouthoul generó una nueva aplicación de la Ciencia, la Sociología y la Política, a la que llamó "polemología", del griego "polemos" que significa guerra, lucha o disputa: el estudio o tratado (logos) de la lucha... solo que de la lucha armada, sangrienta y sus fundamentos sociales.

Una mini biografía, pero con datos centrales, de Gastón Bouthoul

"(Monastier, Lozère, 1899-París, 1980) Sociólogo francés. Creador de la polemología, una disciplina que considera la guerra como un fenómeno biológico y al mismo tiempo social. Escribió Las guerras, elementos de polemología (1951), Tratado de polemología. Sociología de las guerras (1970)."

En:


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Leyes de Duverger

LEYES SOCIOLÓGICAS DE MAURICE DUVERGER

I. Mayoría y proporcionalidad y sus efectos sobre los partidos según Duverger

Los métodos electorales tratan de expresar la complejidad de una voluntad masiva, en forma reducida en representantes. Antes de realizarse elecciones la idea de unanimidad o “consosatio”, en términos de Althusius fue la orientación dominante hasta que en el siglo XIX se pasa a defender la idea de representación con más fuerza. Mill, siguiendo a Tocqueville, sostuvo que el Parlamento debería representar a toda minoría importante, y Dinamarca impuso desde 1856 el principio de representación proporcional como forma de “espejar” la composición del cuerpo electoral, indicando una de las definiciones de representación que ha estudiado Pitkin.

Se impusieron dos métodos básicos de representación. Uno por mayoría, siguiendo el británico, y el otro por representación proporcional.

En 1951 Maurice Duverger formuló una serie de hipótesis acerca del funcionamiento de los sistemas electorales y su influencia sobre los sistemas de partidos políticos que tuvieron una notoria difusión debido a la simplicidad de su exposición. Fueron expuestas en forma más desarrollada nuevamente en 1959. Si bien previamente, en 1945, Duverger creía que podían calificarse como leyes, como enunciados que podían cumplirse siempre sin excepciones (y así volvió a llamarlas en una obra de 1955), en 1951 las calificó de fórmulas. La redacción contenía dos proposiciones:

1. El sistema de mayoría simple tiende a afirmar un sistema partidario dual.

2. El sistema proporcional o el de mayoría obtenida tras una segunda vuelta electoral lleva al multipartidismo.

La versión de 1959 es la siguiente:

1. La representación proporcional conduce a un sistema pluripartidario con partidos estables, rígidos, independientes entre sí, con pocas facilidades para conformar coaliciones.

2. Un sistema que incluya una elección a dos vueltas tiende al pluripartidismo, con partidos que si bien pueden ser relativamente estables, tienen que asumir mayor flexibilidad y dependencia entre ellos a los efectos de conformar coaliciones. [En versiones más recientes la fórmula indica que un sistema de mayoría con base en dos turnos electorales produce un multipartidismo atemperado por la formación de alianzas].

3. Un sistema donde la mayoría es relativa, simple, conduce a un sistema bipartidario, que suelen alternarse en el ejercicio del gobierno.


Esta formulación acerca de los efectos que tiene la “ingeniería electoral”, las fórmulas de asignación de asientos parlamentarios, divididas básicamente en proporcionales y mayoritarias, sobre la “arquitectura política”, sobre el sistema de partidos políticos y más generalmente sobre el sistema político, publicada en un libro sobre los partidos políticos, tuvo un impacto fuerte entre los académicos, primero en Europa y luego en el mundo anglosajón.

En América Latina su impacto fue casi inmediato en los medios académicos, visto el prestigio de la cultura francesa en la región en los años cincuenta. En momentos en que se estaba procesando el fin de la segunda ola de democratización a la que refirió Huntington, la aseveración de Duverger tuvo cierta influencia en el diseño institucional de varios de los nuevos países independientes del tercer mundo. Sin embargo, en la tercera ola, iniciada por los años ochenta en América Latina y acelerada por la caída del imperio interior y exterior soviético, las consideraciones de Duverger quedaron en un segundo plano. La promoción de formas de democracia “iliberal”, como sostiene Zakarías, si bien se centró mucho en los mecanismos electorales, se hizo sustancialmente con base en el transplante de fórmulas, sin atender a las especificidades de cada país. Asimismo la relevancia de los mecanismos electorales en los regímenes autoritarios, que realizan ritualmente elecciones, es baja.

II. Antecedentes a la formulación de Duverger

Había antecedentes importantes de estas hipótesis formuladas por Duverger como “leyes”. Henry Droop sostuvo en 1869 que los grandes partidos de Gran Bretaña y los EEUU se habían formado y mantenido debido al sistema de voto mayoritario. En 1901 T.R. y H.PC. Ashworth señalaron que el método de elección por mayoría relativa afirmaba el sistema bipartidario británico y, en cambio, consideraban destructivo para el partido de gobierno aceptar el sistema proporcional.

Ramsay MacDonald, quien fuera luego primer ministro de Gran Bretaña, sostenía en 1909 que la existencia de la regla de la mayoría era necesaria para poder imponer un programa de gobierno laborista, mientras que la representación proporcional conducía a la necesidad de negociaciones, de forjar alianzas que impedían llevar adelante el programa de un partido. Holcombe en 1910 sostuvo que “la tendencia al establecimiento de un sistema de partidos bajo el sistema de mayoría simple es …casi irresistible”. Finer, Hermens y Mellen argumentaron contra la representación proporcional, los dos últimos visto el proceso político en Alemania y en Italia, consideraban que la misma condujo a la inestabilidad de la República de Weimar y al reino italiano, y facilitaron, como reacción, el ascenso del fascismo y el nazismo.

III. Elaboraciones y críticas de las “leyes” de Duverger

Duverger consideró que la formulación de la tesis del sistema partidario impulsado por el voto mayoritario se apoyaba en:

• Un “efecto mecánico” que hace que los partidos perdedores estén subrepresentados y

• Un “efecto psicológico” actuante sobre los votantes y los dirigentes políticos que no desean desperdiciar sus votos al hacerlo por quienes perciben como perdedores o sin oportunidades de ganar, fragmentando los partidos.


En los hechos Duverger se adelantaba a las formulaciones teóricas que luego se conocieron con el nombre de la “elección racional”. Downs en 1957 sostenía que “un votante racional decide primero cuál partido cree que lo beneficiará más; luego tratará de estimar si ese partido tiene algún chance de ganar. Hace esto porque es parte de un proceso de selección, no de una expresión de preferencia. Por ello, aún si prefiere al partido A, él estará “desperdiciando” su voto si A tiene pocas posibilidades de triunfar, dado que percibe que la masa de los votantes deciden entre los partidos B y C. La elección relevante es entre B y C, por lo cual un voto a A no es “útil”. En ese proceso racional elegir A es irracional”.

Rikker en 1986 sostuvo que este tipo de voto debe considerarse sofisticado y que deben tenerse en cuenta otros elementos. Tomando como base empírica la experiencia de los EEUU indicó que el o los partido/s débil/es, como consecuencia de este sistema electoral, dependerá/n, también del “elemento configurador”, de la fuerza que tenga cada partido en cada circunscripción electoral determinada. En una elección local un partido débil nacionalmente, pero fuerte en lo local tendrá relevancia. Este efecto es citado para justificar la existencia de terceros partidos, especialmente en Gran Bretaña, con los liberales y últimamente con los partidos de base regional.

Las formulaciones de Duverger fueron criticadas a poco de formuladas. Mackenzie en 1957 consideró que las generalizaciones no se podían comprobar en un marco comparativo amplio. En 1958 Grumm consideraba que la representación proporcional es el resultado de la existencia de partidos con determinada estructura y no su causa, invirtiendo el argumento de Duverger.

Algunos plantearon el caso de Alemania con ejemplo contrario, dada la presunta convivencia de un sistema mayoritario con uno proporcional. En realidad lo que hay es un sistema proporcional personalizado, como indica Nohlen, cuya instrumentación es más compleja. El elector tiene dos votos, uno lo da por el candidato preferido en la circunscripción en la que vota, un voto uninominal (Erststimme) y el otro es por el partido de su preferencia, en circunscripciones multimiembros (Zweitstimme). Sin embargo, la adjudicación global de bancas se hace de acuerdo al número de votos por el partido. Un sistema de cinco partidos (anteriormente de tres) convive con este sistema de representación proporcional corregido por elecciones uninominales.

Austria mantuvo largo tiempo un sistema bipartidario a pesar de tener representación proporcional, que también desmentiría a Duverger, pero se atemperaba por la incidencia de la elección directa del presidente en la misma fecha de la elección parlamentaria. Desde 1986 la incidencia de un tercer partido de derecha, forzó una coalición de conservadores y socialdemócratas para poder gobernar, apareciendo luego un partido verde, ecologista, por lo que Austria dejó de ser una “excepción” al planteo de Duverger. Este mismo argumento podía aplicarse en países de América Latina, donde existiendo representación proporcional en muchos casos, la elección sólo tenía dos contendientes fuertes, como en Argentina, Colombia, Uruguay y Venezuela durante gran parte del siglo XX.

En 1971 Rae hizo un estudio comparativo de 121 elecciones en 20 países avanzados. Rae redactó “proposiciones” que formuló con las palabras “tiende a”, “se asocia con”, “casi siempre” y “ a menudo”. Acumuló 22 proposiciones sobre el tema de la proporcionalidad que, sin embargo no llegan a ser muy rotundas. Rae cree que la asociación entre la representación proporcional y la multiplicidad de partidos no es una condición necesaria para que exista un tercer partido, dado que también lo hay en regímenes donde se practica el sistema Westminster mayoritario. Tampoco es una condición suficiente, pues en Austria, hasta 1986 (o en los países latinoamericanos que Rae no citó) puede que no se desarrolle un tercer partido relevante, aunque sí permite el desarrollo de partidos minoritarios. La asociación sólo sería probabilística.

Teniendo en cuenta los casos de Canadá y la India, señaló la existencia de fuerzas partidarias relevantes a nivel regional que hacen que pese a que existe un sistema mayoritario no haya sólo dos fuerzas importantes contendientes. Por ello Rae reformula la expresión de Duverger acerca de la relación entre sistema de partido y método mayoritario de asignar asientos parlamentarios, en esta forma:

“La fórmula de pluralidad (mayoría simple en una sola consulta electoral) está siempre asociada con una competición bipartidaria, excepto donde existen fuertes partidos locales, minoritarios a nivel nacional” (Rae, 1971:95).

Con esta formulación de Rae, menos probabilística, expandió el crédito de Duverger, agregando como punto importante para indicar los efectos de las reglas electorales sobre los partidos la importancia de la configuración de las circunscripciones electorales. Los distritos uninominales tenderían a “presionar el sistema hacia la competición bipartidaria”.

En el pasado, el caso de la India cuando el partido con mayor relevancia era el partido del Congreso se presentaba como un caso especial, donde los cuatro o cinco partidos existentes en algunos casos debían su existencia a una presencia testimonial de sus votantes-militantes y no a una decisión racional, como lo indicó Weiner en 1957. Riker también trató de racionalizar el planteo, pero los hechos posteriores desmintieron estas “explicaciones”. Riker sostenía que la distancia ideológica impedía a los opositores conformar coaliciones. En la práctica esto ocurrió al usarse a partidos “puente” (ver coalición de partidos). En más de una oportunidad desde los años 70 el partido del Congreso fue derrotado por coaliciones de opositores. India también dejó de ser una “excepción” al planteo de Duverger.

Lipset ha sido tambien un crítico y un seguidor de Duverger. Considera que:

“si tuviéramos suficientes casos para evaluar, probablemente se pueda establecer el siguiente orden de correlaciones entre sistemas electorales y número de partidos:

* sistemas presidencialistas con circunscripciones uninominales y sistema de mayoría relativa-bipartidismo;

* sistemas parlamentarios con circunscripciones uninominales y sistema de mayoría relativa - tendencia la bipartidismo;

* sistemas parlamentarios con circunscripciones uninominales y lista alternativa o segunda vuelta-tendencia al multipartidismo, representación proporcional-pluripartidismo”. (Lipset et al, 1967: 250).

IV. Las observaciones de Nohlen

Dieter Nohlen ha sido el crítico más fuerte de Duverger a partir de su estudio sistemático empírico de los sistemas electorales. Nohlen no encuentra consistencia teórica ni comprobabilidad empírica en los enunciados de Duverger y expresamente en Rae. Sostiene que “la relación entre… tipos fundamentales de sistemas electorales y…modelos democráticos no es necesaria desde un punto de vista teórico y no es sostenible desde un punto de vista empírico”. Considera que hay un notorio desconocimiento de los procesos históricos que lleva a atribuir a meras correlaciones positivas el valor de explicaciones causales. Para comenzar, el sistema partidario británico del siglo XIX no era bipartidario. Discrepa, citando a Naumann, el líder liberal alemán en tiempos de la República de Weimar, que creía que el sistema mayoritario era inherente a la existencia del parlamentarismo, indicando que un régimen consociacional puede construirse sin necesidad de representación proporcional. Nohlen lo exponía así en 1981:

“Los efectos atribuidos a los sistemas electorales dependen en la mayoría de los casos de las actitudes en relación con la teoría de la democracia y/o de las concepciones acerca del sistema político y social. No es el análisis metateórico o de modelos el que aclara la cuestión de los efectos de los distintos sistemas electorales, sino únicamente el análisis sociológico real” (Nohlen, 1981: 167 y ss.).

Nohlen sumariza sus críticas en tres ámbitos:

· Empírico. Los efectos que las leyes atribuyen a los tipos básicos de los sistemas electorales son refutados por un número demasiado grande de casos. Existen sistemas multipartidistas en sistemas de mayoría relativa y sistemas bipartidistas en sistemas de representación proporcional.

· Teórico. En vista de las excepciones de las supuestas relaciones causales, sería necesario especificar bajo qué condiciones posibles las leyes tienen validez.

· Metódico. No se compara un sistema electoral con otro, sino que se compara el sistema de mayoría relativa en circunscripciones uninominales con un principio de representación, el de la representación proporcional.


Sartori también criticó la posición de Duverger, pero siguiendo un camino diferente. Perteneciendo al tronco positivista se esforzó por reformular las propuestas llegando a lo que se conoce por las leyes de tendencias de Sartori (ver vocablo Leyes tendenciales de Sartori).

En 1986 Duverger volvió a sus propuestas de los años cincuenta, considerando que la mala traducción al inglés de su trabajo motivó errores notorios. Las presentó como “regularidades empíricas”, comprobadas en muchos casos por el análisis constante. En algunos casos vuelve a las posiciones de 1951 al indicar que “la representación proporcional mantiene virtualmente sin cambios el sistema partidario existente al tiempo de su adopción” (Duverger, 1951:346 y Duverger in Grofman et al, 1986:71).

Duverger presenta casos como el alemán donde considera que la existencia de circunscripciones uninominales corrige los efectos de la representación proporcional, estudia también los casos de Gran Bretaña y de Irlanda, pero en todos los casos tiende a volver a su formulación de los años cincuenta. Tomando en cuenta el caso de Francia, sostiene que el multipartidismo bipolar tiende a ser más fuerte en un sistema de doble vuelta electoral. De todos modos Duverger de alguna manera reconoce a sus críticos al sostener que la “relación entre normas electorales y sistemas pluripartidistas no es mecánica ni automática: un sistema electoral determinado no produce necesariamente un sistema pluripartidista determinado, sino tan sólo presiona las circunstancias para configurar dicho sistema de partidos, es una tendencia que afecta a otras, algunas de las cuales tomarán cauces opuestos” (Duverger, in Grofman et al, 1986:71).

V. Las leyes de Duverger y los sistemas electorales y partidarios de América Latina

Salvo Nohlen, que ha estudiado con detalle los sistemas electorales de América Latina, hay pocas referencias a las leyes de Duverger en los estudios sobre el sistema partidario de la región. En todo caso la realización de elecciones parlamentarias al mismo tiempo que las presidenciales introduce una dimensión que no fue tenida en cuenta debidamente por Duverger. Lijphart en 1992 consideró que la combinación de la fórmula política y el sistema de representación es parte de la explicación de la inestabilidad de la región latinoamericana. Para Lijphart la mejor combinación es parlamentarismo con representación proporcional, seguida de parlamentarismo con sistema mayoritario. Le sigue un sistema presidencial mayoritario y la peor combinación es un sistema presidencial con adjudicación de asientos proporcional, que es la práctica en América Latina.

Nohlen, sin citar a Duverger, hace una elaboración propia, que en los hechos, no sigue las posiciones de Duverger, ni de Sartori. Nohlen considera que en América Latina los sistemas proporcionales tienen estos efectos sobre los partidos:

a) Los métodos de asignación de asientos en el Parlamento, combinados con la existencia de fórmulas presidenciales, ejercen en general un efecto moderado, sea reductor, sobre el número de partidos, o desproporcionador, sobre la relación entre votos y escaños, sin embargo no llegan a determinar su estructura de manera exclusiva y tajante.

b) También depende del sistema configurador de los partidos. O sea, para Nohlen el formato del sistema de partidos afecta la incidencia que tiene el sistema electoral sobre éstos. La falta de reelección y de partidos bien estructurados, y por el contrario el fuerte personalismo, aunados a una cultura política de inestabilidad, diferencia notoriamente a América Latina de los países nordoccidentales.

c) La confluencia de todos los factores ha llevado a resultados disímiles. La comprobación empírica de los años ochenta mostró la formación de mayorías partidarias, mientras que en los noventa ese resultado tendió a desaparecer.

d) En términos más generales diríamos que parece difícil aceptar que la existencia de un determinado sistema electoral “per se” cause la existencia de un sistema de partidos, aunque sí debe admitirse que la ingeniería electoral puede condicionar la acción de los mismos y finalmente su estructura. La existencia de una sociedad integrada o fragmentada condiciona la existencia de partidos más o menos unificados o no, y podría llevar a la adopción de sistemas de representación proporcional. Pero hay una alternativa importante que es la conformación de circunscripciones que permiten la expresión de esas heterogeneidades como alternativa a la representación proporcional. Por consiguiente, desde el punto de vista de la ingeniería electoral hay que tener en cuenta la influencia conjunta de: circunscripciones, métodos de asignación de bancas [proporcional o mayoritario y sus combinaciones], fórmula política [presidencial o parlamentaria, con o sin segunda vuelta], forma de conformar las listas, existencia o no de voto preferencial y otras formas de alterar las listas cerradas y bloqueadas, unificación o no de mandatos del Parlamento y el Ejecutivo, para poder evaluar cómo influyen en su conjunto sobre la estructura de los partidos. La ingeniería electoral está al servicio de una arquitectura de un diseño político conformado por partidos y el ambiente en que se mueven, el Estado, la ciudadanía, la sociedad civil, el poder económico. A ello hay que agregar el peso de la inercia histórica y los condicionamientos sociales y políticos para poder indicar qué ocurre precisamente en cada país, y qué capacidad tiene la ingeniería electoral de presionar sobre los sistemas partidario, político y viceversa.

Vocablos de referencia:

Alianzas electorales

Ballottage

Candidaturas

Circunscripciones electorales

Coalición de partidos

Fórmula electoral

Leyes tendenciales de Sartori

Partidos políticos

Proporcionalidad

Sistemas electorales

Sistemas de partidos

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Juan RIAL

Tomado de:

http://www.iidh.ed.cr/comunidades/redelectoral/docs/red_diccionario/leyes%20sociologicas%20de%20maurice%20d.htm

Duverger: datos biográficos

Maurice Duverger(Angulema, 1917). Sociólogo y politicólogo francés. Profesor desde 1955 en la Sorbona, director de la división de ciencia política de la universidad de París-I hasta 1975 y director, junto con G. Duby y E. Leroy-Ladurie, del centro de análisis comparativos de los sistemas políticos. Ha prolongado su labor docente con una abundante producción escrita dedicada al estudio sociológico de los fenómenos políticos: Les partis politiques (1951), De la dictadure (1961), Introduction à la politique (1964), Méthodes de Sciences sociales (1961), De Fanus: les deux faces de l'Occident (1972), que es un análisis de la crisis de las sociedades industriales occidentales, y L'autre côté des choses (1977), autobiográfica. En tre sus últimos títulos cabe citar La liebre liberal y la tortuga europea (1992), Europa de los hombres (1995), Métodos de las ciencias sociales (1996) e Introducción a la política (1997).

En:

http://www.biografiasyvidas.com/biografia/d/duverger.htm

Nicos Poulantzas: puntos biográficos

Nicos Poulantzas (Νίκος Πουλαντζάς en griego) (1936-1979) fué un sociólogo político marxista greco-francés. En la década de 1970 Poulantzas se hizo conocido junto a Louis Althusser, como uno de los líderes del marxismo estructural y, aunque al principio era leninista, acabó apoyando el eurocomunismo. Su trabajo más conocido es su teoría del estado. También raelizó contribuciones marxistas al análisis del fascismo las clases sociales en el mundo contemporáneo y la caída de las dictaduras de Europa del Sur en la década de 1970 (Franco en España, Salazar en Portugal y Papadopoulos en Grecia).

En 1979 se suicidó, lanzándose del 22º piso de la Torre de Montparnasse de Paris abrazado a sus libros.

Teoría del Estado

La teoría del Estado de Poulantzas fue su reacción contra lo que veía como una de las concepciones más simples del marxismo. Los marxistas instrumentalistas sostienen que el Estado es simplemente un instrumento en manos de una clase social determinada. Poulantzas se mostró en desacuerdo con esto, porque veía a la clase capitalista demasiado centrada en su provecho a corto plazo en lugar de mantenerse en el poder como un conjunto, de forma que ejercerían el poder sólo para su propio beneficio. Poulantzas argumentó que el Estado, aunque es una forma relativamente autónoma de la clase capitalista, consigue sin embargo asegurar el funcionamiento de la sociedad capitalista y por lo tanto beneficia a la clase capitalista. En particular se centró en cómo un sistema inherentemente divisorio como el capitalismo podía coexistir con la estabilidad social necesaria para reproducirse - considerando al nacionalismo en particular como forma de superar las divisiones de clase del capitalismo. Poulantzas fue particularmente influyente sobre el teórico del estado marxista Bob Jessop.

A partir de la noción de hegemonía cultural de Antonio Gramsci, Poulantzas argumentó que reprimir los movimientos del oprimido no es la única función del Estado. En lugar de esto, dijo que el poder debía obtener también el consentimiento del oprimido. Esto se consigue a través de alianzas de clases donde el grupo dominante hace una “alianza” con los grupos subordinados para conseguir su consentimiento. En obras posteriores Poulantas analizó el papel desempeñado por lo que llamaba “la nueva burguesía” para consolidar la hegemonía de las clases dominantes y dificultar la capacidad del proletariado para organizarse. Situándose en una posición contradictoria, es decir, identificándose con su opresor de facto, esta fracción de la clase trabajadora apoya a la burguesía, cuyo destino (erróneamente) cree que comparte. La fragmentación (o la desaparición, según otros) del sistema de clases es, para Poulantzas, una característica definitiva del capitalismo tardío y cualquier análisis político útil debe de tener en cuenta esta nueva constelación de intereses y poder. Un ejemplo de esto puede ser el análisis influído por Poulantzas del New Deal en los Estados Unidos: la clase dominante estadounidense, al satisfacer algunas de las demandas de la clase trabajadora (respecto a temas como el salario mínimo interprofesional o el derecho laboral) ayudaron a cimentar una alianza entre el trabajo y una fracción particular del capital y el estado. Esto era necesario la existencia del capitalismo, pues si la clase dominante simplemente reprime los movimientos de la trabajadora y evita hacer concesiones la situación podría desembocar en una revolución.

Legado

Poulantzas proporciona un análisis matizado de la estructura de clases en una época en la que la internacionalización de los sistemas de producción (la actual “globalización”) estaba desplazando el poder desde la clase trabajadora a la capitalista. En muchos puntos vaticinó el debate actual sobre que el lenguaje maxista con palabras como “clase”, “burguesía” y “hegemonía” encuentra poco eco en la ciencia política contemporánea donde el positivismo obliga a los investigadores a concentrarse en entidades objetivas y medibles. Sin embargo, al situar el análisis de clases en el centrodel análisis político, Poulantzas nos recuerda que los teóricos son en sí mismos agentes políticos y que los trabajos compendio de la política mundial están bañados de la ideología que se supone que tratan de aislar y estudiar.

Tomado de:

http://es.wikipedia.org/wiki/Nicos_Poulantzas

Glosario básico de política y sociedad

Verlo en:

http://www.iesmurgi.org/filosofia/etica/Politica%20y%20sociedad%20Conceptos.htm

Sociología Política como ciencia de actualidad

Un artículo publicado por el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales de España.

http://www.cepc.es/


El artículo tiene la cualidad de examinar el contenido de la sociología política en el capitalismo del siglo XX, de la segunda mitad. Y pone de relieve la polivalencia y multiplicidad de hechos sociales que se conjugan en la interacción del poder y la sociedad.

http://www.cepc.es/rap/Publicaciones/Revistas/2/REP_210_083.pdf